domingo, 9 de agosto de 2015

LIMPIEZA Y SUCIEDAD EN LA “DICMADURA”…


 Columna publicada el domingo 9 de Agosto de 2015 en los diarios La Voz y 2001

Como la congruencia nunca ha sido su fuerte y el cinismo se le da con soltura, el ocupante temporal de Miraflores, jefe del gobierno que puso al pueblo a hacer colas por comida y que entregó el control territorial de vastas zonas del país a bandas de delincuentes a través de las llamadas “zonas de paz”, un tal Nicolás Maduro Moros, dijo el pasado jueves 6 que quiere que haya en nuestro país “una campaña electoral limpia”. 

¿Qué significará para Maduro una “campaña limpia”? ¿Será acaso una como esta, en que los burócratas del CNE cambiaron las reglas del juego para postular candidatos cuando la Unidad Democrática ya había realizado exitosamente sus elecciones primarias y ya había anunciado al país el resultado, igualmente exitoso, de sus consensos, cumpliendo escrupulosamente las normas del CNE que luego el mismo CNE cambiaría? 

¿Será “limpia” una campaña en que los burócratas de la Contraloría General de la República han “inhabilitado” ya a diez candidatos de la Unidad Democrática, candidatos que el oficialismo JAMÁS ha logrado derrotar en una elección regional? 

¿Será “limpia” una campaña en que los burócratas del Tribunal Supremo de Justicia designan directivas de partidos de la Unidad Democrática como COPEI y el MIN, para tratar que esas directivas pro-gobierno coloquen oficialistas camuflados dentro del conjunto de candidatos opositores?

¿Será ese el concepto de “limpieza” del mamotreto Diosdado-Madurista? Maduro utiliza espacios públicos como el Teatro Teresa Carreño y bienes públicos como la señal de los medios de comunicación oficiales para transmitir eventos internos del PSUV, incurriendo abiertamente en peculado de uso, una de las tantas formas de corrupción (como el nepotismo, por ejemplo…) que este régimen ha transformado en parte habitual (habitual, no “normal”) del paisaje. ¿Será eso lo que Maduro llama “campaña limpia”, esta que el PSUV arranca marcada desde su inicio por la corrupción y el ventajismo? 

Toda esta suciedad (ventajismo, corrupción, uso de la instituciones del Estado como rojas guarimbas burocráticas para atentar contra el derecho del pueblo venezolano a construir una salida electoral, pacífica y constitucional a la crisis) tendría que ser advertida por observadores internacionales eficientes e imparciales, que pudieran llevar registro de todas estas barbaridades y estuvieran en capacidad, mediante la presión de los organismos internacionales a que estuvieran adscritas esas misiones de observación, de ejercer legítima presión sobre el gobierno delincuente, el gobierno transgresor, el gobierno sucio... 

Sin embargo, para tapar el juego sucio que el régimen practica en el país, Maduro ha incurrido en otra suciedad, esta vez de carácter internacional, al declarar desde la ONU que rechaza la visita al país de misiones internacionales de observación electoral, por aquello de que “el que la debe la teme”. 

Ya sabemos, pues, a que se refiere el régimen cuando habla de “campaña limpia”: En esto, como en todo, los voceros de la “dicmadura” (así le dicen en los barrios a este gobierno, mezcla de dictadura con desmadre…) corrompen nuevamente el idioma, y utilizan las palabras para invertir completamente su significado: Así como crearon un “Vice-ministerio de la Felicidad” justo antes de iniciar el calvario de la hiperinflación, ahora hablan de “campaña limpia” justo cuando inician la que sin duda será la campaña electoral mas sucia, mas ventajista y mas corrupta que jamás haya desarrollado el oficialismo en los últimos 17 años. 

A todas estas, la respuesta que ha dado la Unidad Democrática ha sido firme, rápida, certera y contundente: A cada inhabilitación se ha respondido apoyando inequívocamente a los agredidos, convocando a sus suplentes para que asuman las posiciones respectivas y movilizando la ciudadanía para que cada inhabilitación le cueste al gobierno una derrota aun mayor. 

Cuando las agresiones han sido no ya contra individuos sino contra organizaciones, también la respuesta ha sido contundente: Roberto Enriquez, Presidente de COPEI, y Manuel Pérez Soto, Presidente del MIN-Unidad, han sido enfáticos al manifestar el apoyo irrestricto de las bases de esos partidos a la Unidad Democrática, ante el intento oficial de “expropiar” las directivas de esas organizaciones. La respuesta de los demócratas ha sido siempre rápida, asertiva, colocando en primer lugar el interés del país y salvaguardando siempre la Unidad como valor y como herramienta del pueblo. 

Estas agresiones de la “dicmadura” contra candidatos, dirigentes y partidos de oposición tampoco han logrado el otro objetivo buscado por el régimen, que consiste en poner a la Unidad a defenderse a si misma en vez de defender al país y especialmente a los pobres y a la clase media empobrecida. No lo lograron, y eso es lo que pone más frenético al régimen: La agenda de la Unidad Democrática la marcamos nosotros, no las agresiones del gobierno. La Unidad tiene estrategia, y en cumplimiento de la misma al día siguiente de la inscripción de los candidatos de la Unidad, el propio sábado 8 de agosto, ya estaban en la calle esos candidatos, recorriendo todo el país, en una jornada nacional de protesta contra el hambre y el hampa, canalizando el descontento y ofreciendo alternativas a las dos calamidades que el gobierno utiliza para agredir con más rudeza al pueblo venezolano: la escasez y la inseguridad.

Porque no lo olvidemos: Hambre y hampa no son “deficiencias” del sistema Chavo-Diosdado-Madurista, sino su producto esperado: El régimen quebró a la economía venezolana, destruyó nuestro aparato productivo y exterminó la capacidad exportadora del país para intentar dominar a los venezolanos por hambre, ya que en estas condiciones los únicos ingresos que aun entran a Venezuela son los que produce el negocio petrolero y esos llegan directamente a las corruptas arcas oficiales. 

Adicionalmente, el régimen desarmó a las policías regionales y municipales, las desprofesionalizó sustituyendo a sus mandos naturales por militares que no tienen formación en seguridad ciudadana y le regaló al hampa el control primero de las cárceles y luego de vastas zonas del país (las llamadas “zonas de paz”) no por casualidad, sino para mantener a la población aterrorizada y desmovilizada, pendiente apenas de la sobrevivencia y no de cómo ejercer sus derechos civiles, políticos, económicos y sociales. 

Pero esas estrategias de dominación generaron al régimen un resultado inverso al que ellos buscaban: La gente se hartó de vivir con hambre y con miedo, con colas e inseguridad, y se volcó hacia la esperanza de cambio. Allí están las encuestas, todas, restregando esta verdad en la cara de cemento del gobierno ¡Palante! 

“¡YA BASTA DE MENTIRAS!”





 Columna publicada el domingo 2 de Agosto de 2015 en los diarios La Voz y 2001.  Las palabras comentadas en el texto puede ubicarlas en el video entre los minutos 18:20 y 21:10

“Ayer saliendo de la Catedral…Un hombre joven de unos 25 años llorando a la puerta de la catedral me dijo ‘Chávez ayúdame, tengo dos hijos y se me están muriendo de hambre, y yo no quiero meterme a delincuente obligado… ¡Sálvame de este infierno!’ ... Esa es la verdad… ¡Abrámonos el corazón, ya basta de mentiras!… ¿Cuántos hombres como ese que lloró conmigo, a las puertas de la Catedral, no terminan en la cárcel de Yare o en El Dorado…? … porque muchos de ellos tienen que salir a robar un pan para darle a su hijo y no se muera de hambre… ¿Cuántos no caen en eso?… Yo creo que yo también caería, hermanos… Si yo fuera ese hombre joven que lloró conmigo ayer a las puertas de la Catedral de Caracas, y viese a mi hija a punto de morir de hambre, yo creo Dios mío que yo saldría a la medianoche a hacer algo para que mi hija no vaya a la tumba…” 

NO HAY “SAQUEOS BUENOS” Y “SAQUEOS MALOS”… 

Estas son palabras textuales de Hugo Chávez Frías, pronunciadas el 4 de febrero de 1999, al final de un desfile militar en el Paseo de Los Próceres. Tales palabras indignaron a muchos, que vieron en ellas una clara incitación a delinquir. Pero justo es decir que esas palabras conmovieron también a muchos, probablemente a muchos más, que vieron retratadas en ellas su propia angustia. 

El objeto de estas líneas no es, obviamente, recrear aquella polémica sobre palabras, sino llamar la atención sobre realidades: este viernes 31 de Julio de 2015, 16 años después de aquel discurso, un hombre joven (con 21 años apenas, más joven incluso que aquel que la anécdota presidencial ubicaba llorando a las puertas de la Catedral) muere asesinado de un tiro en el pecho. A diferencia del hombre del relato presidencial, éste si tenía nombre y apellido: Gustavo Patiñez Gómez. Y si, tenía un hijo, un bebé de apenas cuatro meses de nacido. ¿En que circunstancias es asesinado este venezolano? Pues muere en medio de los hechos de violencia ocurridos este viernes en San Félix, Estado Bolívar. En estos sucesos violentos, vecinos enardecidos por el hambre y la escasez arremetieron contra unos comercios y por la fuerza se apropiaron de alimentos. No encontró Gustavo Patiñez Gómez, albañil, la “comprensión sociológica” de la que se habló en Los Próceres hace 16 años. Encontró una bala. Y la paró con el pecho. 

ROBAR POR HAMBRE, UN MILLÓN DE MILLONES DE DÓLARES DESPUÉS… 

En aquella Venezuela de hace 16 años no había colas para comprar comida, ni había que dejarse marcar como ganado con números en los brazos para poder entrar a un abasto o mercado, ni había que presentar la cédula de identidad o poner la huella digital para comprar un kilogramo de harina de maíz, o de azúcar, o de café, o un litro de aceite, o un rollo de papel higiénico. En aquella Venezuela, pintada por el discurso presidencial como un reino de injusticia, no había escasez ni racionamiento. Y eso a pesar de que el precio del barril de petróleo en esos tiempos era de sólo nueve dólares… 

16 años después, en esta Venezuela en que fue asesinado este joven venezolano en las dolorosas circunstancias ya descritas, el precio internacional del petróleo es cinco veces mayor: Ronda los 50 dólares por barril. Pero hace apenas once meses, es decir, hasta septiembre del año 2014, el precio del petróleo venezolano llegó a mas de 100 dólares el barril. Y esos altos precios petroleros duraron doce largos años, tiempo en que a los bolsillos del gobierno entraron -sólo por concepto de renta petrolera- un millón de millones de dólares, más dinero que el manejado por todos los gobiernos anteriores juntos, desde el Cacique Guacaipuro hasta Caldera II. 

Hoy, 16 años después, un millón de millones de dólares después, toneladas de discursos después, en esta Venezuela hay hambre, hay colas, hay escasez y racionamiento, mientras que los dueños del poder se siguen haciendo cada vez mas ricos, sin producir mas que miseria… para los demás. 

“¡ÁBRANSE LOS CORAZONES! ¡YA BASTA DE MENTIRAS!” 

Insistimos: El tema no son las palabras, son las realidades. En vez de asumir estas realidades el régimen sigue anclado en sus versiones politiqueras de siempre: Que aquí no pasa nada, que lo que hay es una “guerra económica”, desarrollada por una “burguesía” a la que en verdad tienen acorralada desde hace años, y por un “Imperio” con cuyos representantes se toman “selfies” y se abrazan sonreídos, en negociaciones tan secretas como las cuentas bancarias de los negociadores… 

Es entonces cuando provoca repetir a los actuales dueños del poder al menos una línea de aquel discurso de 1999: “¡Ábranse los corazones! ¡Basta de mentiras!” ¡Hoy nuestro país tiene todos los problemas y ninguna de las posibilidades que tenía hace 17 años, y tenemos además todos las desgracias generadas a los largo de estos 17 años de destrucción y caos! ¡Y eso es culpa de Uds., sólo de Uds., los que desperdiciaron la más brillante oportunidad que ha tenido Venezuela para dar un salto hacia el desarrollo, la prosperidad y la calidad de vida para todos! ¡Asuman su culpa ante el pueblo y ante la historia! ¡Asuman su barranco, su vergüenza y la derrota que se les aproxima! ¡Ya basta de mentiras! 

INCENDIAR AL PAÍS PARA EVITAR LAS ELECCIONES QUE VAN A PERDER 

Al pueblo no le pedimos “paciencia”, sino claridad y firmeza: La violencia jamás ha sido solución, ni antes ni ahora. El régimen, que antes justificó la violencia para satanizar el pasado, ahora quiere utilizar la violencia para impedir el futuro. El régimen necesita incendiar el país para tratar de evitar su segura derrota el próximo 6 de Diciembre. Los venezolanos sabemos que la solución real al problema del hambre, de la escasez y de las colas no es saquear una gandola volcada o desvalijar un comercio, sino tener un modelo económico distinto, que genere riqueza en vez de distribuir miseria. 

Y para tener un modelo económico distinto tenemos que lograr un gobierno diferente. Y para alcanzar un gobierno diferente el pueblo democrático tiene literalmente que arrasar en las elecciones parlamentarias del próximo 6 de Diciembre. Mientras construimos esa solución real al problema de fondo, es necesario enfrentar, aquí y ahora, las agresiones económicas del gobierno contra el pueblo, y transformar la justa indignación de la gente en energía de cambio. Por eso hemos insistido en la necesidad de que la Unidad opositora desarrolle no una "campaña electoral" sino una CAMPAÑA SOCIAL, centrada en la solidaridad activa con la gente y sus problemas, solidaridad que debe ser ejercida en la calle, pero en esa calle donde esta la gente, la de las colas, la del barrio, la de los espacios de la pobreza urbana y rural, la de los espacios de la clase media empobrecida y agraviada.

¡Allí, en la calle, EN ESA CALLE, nos vemos! ¡Palante!

TARJETA ÚNICA VS. DICTADURA DE LAS COLAS Y EL HAMPA


Columna publicada el domingo 26 de Julio de 2015 en los diarios La Voz y 2001 

La tarjeta única de la oposición ha sido recibida por el país como tenía que ser: con aplausos mayoritarios y lloriqueos aislados. 

Los aplausos han surgido de la gran mayoría nacional que quiere cambio y que sabe además que para ganarle a esta neodictadura al borde del colapso no basta con “sacar más votos” sino que es indispensable que sean muchos, muchos más que los del adversario. Una ventaja de un montoncito de votos se puede tapar con una trampa. Una ventaja de una montaña de votos no se puede tapar de ninguna manera. El pueblo sabe eso. Y por eso la tarjeta única es una necesidad nacional. Para expresar de manera inequívoca la voluntad unitaria del campo democrático. Y también para dotar el pueblo de un instrumento con el que sin confusión alguna, sin ningún sectarismo, se pueda propinar al régimen corrupto e ineficiente la aplastante derrota que merece. 

Los aislados lloriqueos a propósito de la tarjeta única han surgido de los viudos de la corrupción. 

En efecto, estos son los únicos que lamentarán el fin del actual reinado de la escasez y la inseguridad. Hace años, estando aun con vida Hugo Chávez, eran ya muy frecuentes las protestas de calle (contra la inseguridad, por mejores servicios públicos, por viviendas, etc.), muchas veces protagonizadas por sectores inconformes de la base chavista. Con el Radar de los Barrios en numerosas ocasiones dimos cobertura a esas protestas, que siempre eran silenciadas por el Canal 8 y demás medios oficiales. Al interrogar a los entonces chavistas de base sobre porque protestaban contra el gobierno, invariablemente decían “mi Comandante es bueno, mi Comandante tiene buen corazón, pero esta mal rodeado. Mi Comandante no sabe que nos están haciendo esto. A mi Comandante le ocultan la verdad unos tipos que tienen la Revolución como un negocio. Los Maduro, los Jaua, los Diosdado, los Ameliach, todos esos tipos que son cada vez más ricos mientras el pueblo esta cada vez más pobre...”. 

La verdad es que Chávez si sabía lo que estaba pasando, y precisamente para que ocurriera eso es que pasó gobernando 13 años con los mismos sujetos. Pero lo que nos interesa destacar ahora es que esos individuos, que desde hace años están plenamente identificados hasta por el pueblo oficialista como pésimos gobernantes, son precisamente los únicos que en este momento se sienten amenazados por la Tarjeta Única, porque saben que ese será el instrumento de los opositores tenaces y de los chavistas desencantados para sacarlos del poder. 

Pero siendo muy importante la tarjeta única, es mucho más importante el conjunto de acuerdos que la hicieron posible.

Ciertamente, la Unidad llega a la tarjeta única como resultado de un debate ejemplar: sin descalificaciones, sin “buenos y malos”, sin “duros y blandos”, sin “moderados y radicales”, asumiendo que TODOS los participantes en el debate tienen la mejor intención de avanzar. Ya eso es un cambio positivo en relación al pasado aun reciente. Pero mas importante aún es que los acuerdos van mucho más allá de la tarjeta, es decir, VAN MUCHO MÁS ALLÁ DE LO ESTRICTAMENTE ELECTORAL. 

Hace algo más de cinco años la Mesa de la Unidad Democrática se crea para resistir y oponerse a un régimen autoritario que tenía todo el dinero del mundo, tenía a un liderazgo demagógico y carismático y tenía incluso cierto apoyo internacional. Hoy la situación del país es radicalmente distinta: el oficialismo esta sin liderazgo; la caída de los precios internacionales del petróleo ha hecho que los dólares que entran al país sean objeto de una cada vez más feroz competencia entre las mafias de la corrupción roja, que concentrados en robar ya no se ocupan ni de aparentar que gobiernan; el malestar económico se extiende a todos los sectores sociales, en todas las regiones del país... 

Ante este cuadro, la oposición tenía que reinventarse, pues el país ya no nos está pidiendo ser “resistencia” o ser “oposición” sino ser ALTERNATIVA DE PODER, el país lo que nos reclama ahora es demostrar que podemos SER GOBIERNO! Demostrarlo pasa por garantizar que la Unidad va mucho más allá de un listado de candidatos. Y eso es precisamente lo que plantean los acuerdos alcanzados por la Unidad Democrática el pasado miércoles 22 de Julio... 

La Unidad venezolana ha cambiado, no solo en su estructura sino en su propósito. De ser un grupo de organizaciones reunidas para oponerse a algo o a alguien, ha pasado a ser un conjunto de fuerzas políticas y sociales reunidas en torno a un proyecto de cambio político. Es decir, no solo estamos “en contra” de este desastre, sino que estamos activamente a favor de un proyecto de país. 

Ese proyecto de país está claro en el discurso opositor y, mas importante aún, en el imaginario venezolano: Estamos luchando para construir en Venezuela una economía libre, abierta, productiva, capaz de financiar una sociedad justa, socialmente responsable, solidaria, en el marco de una democracia transparente y funcional, una democracia de instituciones con pueblo, de poderes autónomos que se regulen mutuamente impidiendo el abuso del poder o al menos garantizando que tal abuso no sea premiado por la impunidad.

La Unidad ya no será “un espacio de articulación”, sino la dirección política del campo democrático, capacitada por tanto para dar conducción en el exigente periodo que se abre el próximo 6 de diciembre. 

El 6 vamos a ganar la mayoría en el Asamblea Nacional, y esa mayoría la vamos a ejercer para construir soluciones a la grave crisis económica, social, institucional y ética que enfrenta el pueblo venezolano. Y si algún otro poder intenta obstaculizar, sabotear o retardar ese necesario proceso de construcción de soluciones, esta mayoría nacional representada en la nueva Asamblea Nacional procederá entonces a utilizar los mecanismos que la Constitución prevé para solucionar situaciones como esas: la enmienda constitucional, la reforma constitucional, el referendo revocatorio o la mismísima Asamblea Nacional Constituyente, instrumentos todos de naturaleza constitucional, pacífica, electoral y democrática para garantizar que los autores del actual desastre no se conviertan mañana en obstáculos para la construcción de las necesarias y urgentes soluciones. 

Todo ese tránsito del país de las colas al país abastecido, del país de los pranes y las bandas al país de la seguridad y la confianza, de la Asamblea de Diosdado a un parlamento útil al pueblo, de la Venezuela de Maduro a una Venezuela de todos, va a requerir de un liderazgo unido que tenga una firme capacidad de conducción. Eso es lo que el campo democrático ha estado construyendo todos estos meses. Esta es la respuesta del liderazgo democrático a la profundidad y amplitud de la crisis que enfrentamos. 

Esto es lo que la tarjeta única hace evidente: ¡Unidos y Palante!

10 PUNTOS PARA ENFRENTAR Y VENCER LAS INHABILITACIONES


 Columna publicada el domingo 19 de de Julio de 2015 en los diarios La Voz y 2001

1) El gobierno lo ha inhabilitado A USTED, a usted que esta leyendo estas líneas en este momento: Usted esta inhabilitado para comprar los alimentos que quiera, en el comercio que quiera, el día que quiera. Usted esta inhabilitado para comprar las medicinas que usted mismo o su familia necesiten. Usted esta inhabilitado para vivir sin miedo, pues nadie sabe en que momento puede caer bajo las balas del hampa o bajo las de algún operativo tipo “OLP”, de esos que –sin fiscales del Ministerio Público ni ordenes de allanamiento- irrumpen en algunas zonas bajo la consigna de “disparen primero y averigüen después”. 

2) Usted esta inhabilitado hasta para ejercer su propia profesión u oficio, pues el cierre de empresas y la falta de materia prima ha obligado a miles de profesionales, técnicos y artesanos a convertirse en taxistas, moto-taxistas o bachaqueros. Así que los inhabilitados no son solamente Daniel Ceballos, María Corina Machado o Enzo Escarano. Aquí en Venezuela sobrevivimos 30 millones de inhabilitados. Nos inhabilitó el régimen, el Diosdado-madurismo, la misma cúpula corrupta que nosotros, con los votos, vamos a inhabilitar en diciembre. 

 3) Las inhabilitaciones políticas no son, por cierto, un gesto de “fortaleza” de un gobierno prepotente. Muy por el contrario, son claros signos de una neo-dictadura al borde del colapso. 

4) En efecto, veamos: Antes sus agentes electorales del CNE manipulaban elecciones. Ahora las sabotean...; Antes apabullaban a sus adversarios con ventajismo brutal. Ahora los "inhabilitan"...; Antes encarcelaban y violaban juezas. Ahora hacen demagogia con la paridad de genero...; Antes presumían del "Índice de Gini" y otras estadísticas que mostraban los supuestos “avances de la Revolución”. Ahora ocultan las cifras de la Inflación., del desempleo, hasta de las epidemias..; Antes criticaban aquella consigna de "plomo al hampa". Ahora "dan de baja" a sus ex amigos d la Cota 905, a los que ellos mismos llamaban “buenandros”, ejerciendo una violencia tan ilegal como la perpetrada por las mismas bandas… 

5) Que nadie se equivoque: Las inhabilitaciones constituyen una clara confesión de DEBILIDAD de un régimen que tiene trampas pero no votos. Por eso buscan en las polvorientas gavetas de los escritorios de la Contraloría General de la República las “victorias” que no pueden obtener en las mesas de votación. 

6) Organismos como la OEA, la Unión Europea, la UNASUR, la ONU, entre otros, que han manifestado su interés en que la crisis venezolana se resuelva mediante elecciones, deben venir de inmediato a condenar este grotesco fraude electoral del gobierno. Porque las elecciones no son sólo el 6 de Diciembre. Las elecciones empiezan desde el mismo momento en que se determina la fecha y se escogen los candidatos que en ella van a participar. En Venezuela, una vez que el pueblo le arrebato al gobierno la fecha de las elecciones, el gobierno ha desplegado una serie de maniobras para decidir ELLOS quienes serán los candidatos de la oposición. Para ello, primero hicieron una maniobra demagógica con el tema de la paridad de género. Ahora inhablitan en semana y media a tres candidatos opositores, y amenazan hacerlo con otros mas. En resumen, el Régimen quiere decidir quienes serán los candidatos de la oposición. ¡Eso es Fraude! 

7) La única respuesta REAL, CONTUNDENTE, a las inhabilitaciones es garantizar que quien sea postulado por la Unidad obtenga una victoria abrumadora. Esa línea de conducta fue la dictada por el pueblo demócrata venezolano en San Cristóbal y San Diego, cuando ante las ilegales e ilegitimas inhabilitaciones de Daniel Ceballos y de Enzo Escarano en esas alcaldías, las votaciones alcanzadas por Patricia de Ceballos y por Rosa de Escarano superaron el 76% y el 84% de los votos emitidos, respectivamente. 

8) Para lograr esas victorias abrumadoras (indispensables para vencer a un régimen que tiene control total de las instituciones) es vital que nuestro foco de atención y acción política y social siga en la agresión del gobierno contra las mayorías, y no en sus agresiones contra la oposición. El gobierno quiere que nos pongamos hablar de las inhabilitaciones, de las persecuciones, de las agresiones contra los candidatos y dirigentes de oposición, para que dejemos de denunciar el drama de las colas, la escasez de comida, la destrucción de la moneda, la inseguridad atroz. 

9) Nada ni nadie debe apartarnos de la agenda ECONOMICA Y SOCIAL, que es la que une al país contra el Régimen. Es la agenda de la realidad, la agenda de la gente, la agenda económica y social, la escasez y la inseguridad, lo que ha unido a todo el pueblo venezolano contra el régimen y sus sicarios institucionales. Nuestro mensaje y nuestra actividad tienen que seguir allí, pegados al dolor del pueblo, construyendo a su lado la esperanza del cambio urgente y necesario. 

10) Nada ni nadie debe apartarnos tampoco del camino electoral, EL ÚNICO en que el Régimen tiene todas las de perder: El régimen tiene dinero, tiene control institucional, tiene militares que olvidaron que la Constitución establece que la Fuerza Armada no estará al servicio de ninguna parcialidad política, tiene “colectivos” paramilitares de diversa clase, desde los “ideológicos” hasta los meramente hamponiles. El régimen tiene todo eso… pero no tiene pueblo, por lo que el UNICO escenario de lucha donde esta evidentemente derrotado es el ELECTORAL. Por eso, el mensaje de nuestros candidatos agredidos, Ceballos, María Corina y Escarano, ha sido contundente, llamando a usar el voto cómo instrumento de REBELDÍA CÍVICA. 

El pueblo venezolano decidió que quiere CAMBIO. Eso es una “tendencia irreversible”, como bien lo saben Tibisay y su jefe Nicolás. Y también decidió que ese cambio debe ser PACÍFICO Y ELECTORAL. Para lograrlo es necesario tener UNIDAD Y CONSISTENCIA. De eso se trata. ¡Palante! 

EL EXITOSO PACTO DE LOS POBRES Y LA CLASE MEDIA


 Columna publicada el domingo 12 de Julio de 2015 en los diarios 2001 y La Voz

“¿Y al pueblo que le importa a cuánto se ponga el dólar? ¡Total, el pueblo no gana en dólares, lo que gana lo gana en bolívares y nunca viaja a ninguna parte!”. Esas son las expresiones que usaban hasta hace poco los voceros del gobierno y del PSUV, para tratar de restarle importancia a la demolición del bolívar. Acostumbrados a hablar “en nombre del pueblo” sin consultarlo, es decir, acostumbrados a sustituir al pueblo en vez de expresarlo o representarlo, la clase política gobiernera pensó que una vez mas podían salirse con la suya. No fue así. 

“CANILLA TODAY” 

Es posible que el común de la gente no tenga postgrados en macroeconomía ni haya hecho cursos avanzados de análisis de datos, pero eso no hace falta para identificar con precisión lo que esta ocurriendo en Venezuela. El hombre de la calle, la mujer del pueblo saben que si van a comprar pan y no lo encuentran, o lo encuentran racionado, es porque en Venezuela no se siembra trigo. El trigo es importado. Y al importarlo hay que pagarlo con dólares. Y dólares no hay. Y no hay porque se los robaron. Así que claro que si existe una relación directa entre la vida concreta del pueblo y el precio del dólar, como expresión del desastre perpetrado por el gobierno en materia económica. 

Y no es sólo el tema del pan. Cuando hay que pagar una resma de papel a 4.500 bolívares, o 21 mil bolívares por un par de zapatos, o cuando se buscan medicinas y no se encuentran, cuando no hay vehículos nuevos en los concesionarios y los usados valen 100 veces mas que cuando estaban nuevos, cuando es “normal” que un celular inteligente valga lo que antes valía un apartamento, cuando esas cosas ocurren, entonces no hay duda: El gobierno quebró al país, lo saqueó, convirtieron la miseria de millones en el gran negocio de unos pocos, y todo eso lo hicieron en apenas 16 años… ¡Y en nombre del socialismo! 

LA CALLE CON PUEBLO… 

Sin embargo, el desastre económico del gobierno no es por si mismo garantía de cambio político. Es necesario, junto a la denuncia certera de lo que hoy pasa, levantar la alternativa que se propone, la realidad a la que se aspira. Luchamos porque queremos una Venezuela del primer mundo, capaz de garantizarle alta calidad de vida a todos sus habitantes y para eso tenemos que tener una economía libre, abierta, productiva, que sea capaz de financiar una sociedad justa, inclusiva, solidaria, donde el pobre tenga las herramientas de educación y de trabajo que le permitan hacerse propietario de su vida y salir de la pobreza siendo dueño de su futuro, y eso sólo es posible en el marco de una democracia funcional, eficiente, transparente, porque si no estamos en un gobierno democrático quienes detentan el poder tienen la tentación, sin sanción alguna, de abusar de ese poder y terminan robándose el dinero y atropellando a la gente, como hoy. 

Para lograr todo eso hay que tener un gobierno distinto y una ciudadanía diferente, empoderada, que asuma lo público como propio, y todo esto pasa ahora en primera instancia por la victoria democrática en las elecciones parlamentarias. Responder a preguntas cruciales sobre cómo se defienden los votos en la Cota 905 de Caracas, en Los Tronconales de Barcelona, en la Parroquia Miguel Peña de Valencia, es decir, cómo se defienden los votos en la pobreza urbana y en la rural, pasa por un tema fundamental: ORGANIZACIÓN Y ACTIVISMO, esos votos allí se defienden con la gente de allí, que por cierto también está harta de este gobierno, pero necesita información, herramientas y eso se logra es a partir del contacto cercano, del casa por casa, del puerta a puerta de tomar esa “calle” que desde hace mucho venimos diciendo que es la fundamental: la calle con pueblo por convencer. 

CONDUCCIÓN Y ORGANIZACIÓN 

La dirigencia política opositora debe aportar CAPACIDAD DE CONDUCCIÓN en esta hora de crisis, de desmantelamiento del Estado, de fractura de la convivencia, y esa capacidad de conducción debe expresarse en lo oportuno de sus orientaciones, en la pertinencia de sus planteamientos y en la calidad de sus propuestas. La ciudadanía democrática debe aportar organización, esfuerzo sistemático y compromiso. 16 años de mesianismo, caudillismo y falsos héroes son mas que suficientes. El desastre a que nos han conducido esa receta es harto evidente. A las soluciones que Venezuela requiere no se llegara porque el país se apelotone detrás de un supuestamente nuevo “liderazgo carismático”. Venezuela necesita, requiere, exige, trabajo en equipo y claridad de miras. 

La realidad económica determinó que en nuestro país se produjera en este año 2015 lo que para muchos era imposible: Un pacto no escrito entre los pobres y la clase media, para juntos salir de este régimen calamitoso y corrupto. Eso es lo que hay en la calle, lo que se refleja en las encuestas. Ese es el resultado del malestar que hoy atraviesa por igual barrios y urbanizaciones, escalinatas y avenidas. Ahora es necesario proyectar ese nuevo pacto de cara al futuro. 

 ¡CLARO QUE SE PUEDE! 

En efecto, el exitoso pacto de los pobres con la clase media esta acabando con el Régimen. Esta Nueva Mayoría en ciernes, esta policlasista Unidad Nacional lo primero que tiene que hacer es transformar la intención de voto en voto real, convertir la posibilidad de victoria en victoria cierta. Lo segundo es transformar la victoria electoral en triunfo político, colocando efectivamente a todo el poder al servicio del país. Lo tercero es avanzar con un proyecto común en la construcción de esa economía libre, de esa sociedad inclusiva y de esa democracia funcional que son las tres herramientas indispensables para llegar al Primer Mundo. 

Y todo eso es posible si lo asumimos juntos, Políticos con Mayúscula, Ciudadanos con “C” grande, venezolanos todos. ¡Claro que se puede! ¿No hemos podido los venezolanos hacer empresas como Empresas Polar? ¿No hemos podido los venezolanos construir instituciones como Fe y Alegría? ¿No hemos sido los venezolanos capaces de construir maravillas como el Sistema Nacional de Orquestas, el Metro de Caracas, el Teatro Teresa Carreño, el Acueducto Tuy II y el Sistema Eléctrico Interconectado? ¿Es que no fuimos nosotros, los venezolanos, los que a pulso convertimos la PDVSA original en una de las empresas petroleras mas prestigiosas del mundo, y que logramos hacer de las empresas de la CVG el sueño posible de una Venezuela industrial post-petrolera? Este país no siempre fue el desastre de los últimos 16 años. Venezuela es mucho, mucho más. Y rescatarla no solo es posible: ¡Es obligatorio! ¡Palante!